Para comprender la importancia del área de recursos humanos y como te ayuda a formar tu equipo de trabajo, empieza por explorar sus alcances e intégrate poco a poco a su manejo.
Imaginemos que nuestro proyecto o empresa es un auto y nuestro equipo de trabajo es el mecanismo interno. Si este no logra funcionar de manera coordinada o adecuada, sin importar lo bello que sea en su exterior o las ideas que se tengan sobre su potencial, simplemente no podrá echarse a andar.
Esta es la importancia del área de recursos humanos. Nosotros, nos encargaremos de las prácticas y políticas para el manejo de las relaciones que se gestarán en el interior de la compañía. Entre todo esto, tendremos aspectos que no podemos dejar de lado por nada del mundo y será lo primero en lo que nos centraremos para lograr obtener el prometido equipo de trabajo. Estos, son los señalados por Varela y Desler (2015):
1. Reclutar a gente preparada.
Para crear un buen grupo, no solamente se trata de reunir a un equipo con el que creamos nos llevamos bien o pudieran estar interesados; sino más bien es todo un proceso de búsqueda y estrategia para dar con las personas adecuadas. Recuerda, hacer bien este paso te puede brindar una ventaja enorme, ya que en una gran parte te ayudaran a lograr la representación de tu servicio, es decir, qué experiencia se brindara a los clientes.
2. No existe el candidato ideal, toca capacitar.
El hecho de encontrar a tus trabajadores ideales no significa que ahí termina la tarea. Por el contrario, estamos a punto de comenzar. Recuerda que nunca se contrata a alguien “perfecto”. Simplemente, son personas que cumplen con el perfil y también que deseen y estén dispuestas a explorar y trabajar sus zonas de oportunidad. La interacción, tanto con tu mercado como con tus trabajadores, te ira brindando las respuestas de las áreas de capacitación que serán necesarias abordar. Recuerda, que cualquier área se encuentra en constante movimiento, por lo que tus capacitaciones tendrán que ir acorde a esto y ser continuas.
3. Evaluar el desempeño del equipo de trabajo.
Esta parte, no solamente te brindara las áreas de oportunidad a explorar de tus trabajadores. Por ejemplo, el desempeño e interés que presenta. Sino que también te mostrara si entre tus trabajadores existe un buen nivel de comunicación, de resolución de problemáticas, desacuerdos, si la capacitación que estas brindando es adecuada, etc. También, te mostrara resultados a gran escala, que te acercarán a la mirada del cliente, qué tanto se acerca tu servicio a aquello que deseas y, más importante, a la satisfacción de las expectativas y necesidades de nuestros usuarios.
4. Remunerar
Aunque, este punto pareciera ser obvio, es uno de los aspectos más importantes a recalcar. ¡Todo trabajo debe ser remunerado! Algo importante, es evitar caer en el modelo de explotación. Las personas son sujetos más no objetos; es algo que debemos siempre tener en cuenta. Por tanto, es importante que para demostrar nuestro respeto por el otro, se cumplan reglas básicas al momento de remunerar:
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Tener un trato explícito desde un inicio de cuáles será el valor por cada servicio que ellos brinden.
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Que la remuneración se establezca de acuerdo a una encuesta salarial con otras empresas.
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Desarrollar rangos de sueldo.
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Establecer fechas y horarios de pago.
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Remuneraciones por habilidades y competencias más que por puestos.
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Remuneraciones por resultados y desempeño más que por antigüedad.
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Hacer retribuciones intangibles y basadas en reconocimientos, certificados, mercancía, etc.
5. Ofrecer un ambiente seguro, con trato justo y ético.
El ambiente seguro se logra, ante todo, a partir de la buena comunicación y esta abarca la asertividad. Es decir, poder conducirnos sin pasar sobre los derechos del trabajador. Después, gran parte de las problemáticas que se manejan en recursos humanos se relacionaran con asuntos éticos. Por lo que es necesario para evitarlo:
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Que se establezcan, dentro del ambiente de trabajo, juicios normativos.
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Los procesos de evaluación, disciplina y despidos deben hacerse con honestidad y siempre con dignidad hacia el individuo.
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Todos deben de cumplir las reglas éticas, incluidos los altos rangos, incluso con mayor importancia. Así servirán como modelos y se establecerá menos tolerancia a cuestiones antiéticas.
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No aceptar tratos personales que pudieran incidir en la interacción laboral, como aceptar objetos monetarios, dádivas, regalos, etc., ni tampoco ofrecerlos.
Formar un equipo de trabajo, empieza de algún modo.
Comenzar por implementar estos pasos te ayudara a tener una mayor claridad de las áreas básicas que debes cubrir al dirigir un grupo de trabajo, estamos hablando de tener un compromiso con esas personas, para que así exista un ambiente óptimo de trabajo y, por tanto, un nivel de cooperación que pueda llevarte a tus objetivos.
Referencias
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Dessler, Gary & Varela Juárez Ricardo (2015). Administración de recursos humanos. Prentice Hall.
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